Haciendo un recorrido por la escuela, es indudable que en los últimos
años hemos visto una disminución desmedida de las asignaturas artísticas, dando
espacio al incremento de horas en otras materias como ciencias, español, inglés
y/o matemáticas.
Cabe aclarar que el aprendizaje de estas asignaturas es fundamental,
pero desplazan indiscutiblemente el espacio que el arte necesita para estimular
la creatividad, la libertad de pensamiento y el valor estético, para el
desarrollo emocional y espiritual del estudiante.
Este último punto es
primordial incluirlo en la escuela, la familia, la práctica diaria en comunidad
y sociedad.
La
explicación estética del mundo forma y forja la personalidad, ya que abarca al
ser y tiene la capacidad de conmoverlo. La estética en la educación es un
ingrediente fundamental para el proceso formativo y social del ser, debido a que
está estrechamente ligado a la instrucción
y educación armónica e integral.
El
docente en la escuela es el guía trascendental en la formación de valores, que
serían imposibles de forjar sin la estética, teniendo en cuenta la importante
tarea de la educación social donde son fundamentales la ética y el respeto.
La
educación estética va encaminada a la enseñanza de un ser preparado para adoptar y acoger en su vida la esencia de las
carencias y magnificencias de una sociedad, donde reconoce el entorno en el que
vive, es consecuente y consiente de los escenarios planteados en su existir. Un
ser capacitado para entender los cambios del universo, la naturaleza, el orden,
el pensamiento humano, las relaciones interpersonales y la armonía, como
también, la formación de la conciencia, sentimientos éticos, capacidades
artísticas asociadas a las capacidades cognitivas, la creatividad y los
sentimientos.
ARTICULACIÓN ENTRE LA ESTÉTICA Y EDUCACIÓN
La enseñanza de lo estético está sumergida en los lineamientos de la
educación por paramentos legales en busca del crecimiento integral de los
estudiantes; sin embargo, la realidad es otra, existe un distanciamiento cuando
se castiga, señala o juzga al alumno por su capacidad de proponer, cuando insurrecto y rebeldemente reclama lo que desea hacer en el ámbito artístico, siendo
siempre impositivo el orden y la supuesta disciplina, coartando la creación, sin
detenerse a promover lo realmente importante que es el desarrollo del talento.
El limitado tiempo, algunos guías de nuestro modelo educativo y hasta
las directivas de las escuelas, son agentes restrictivos con paupérrimas
indicaciones sobre la educación artística, reduciendo la posibilidad de un
contacto real con arte, dejando como resultado la réplica de algo ya
desarrollado y no la creación desde la practica real y vivencial.
LO
EXTRA-ESTÉTICO EN LA ESCUELA
El termino o concepto de extra estético se desliga de la experiencia y
técnica de la creación artística. Sin embargo; es necesario involucrar las
dimensiones estéticas ya que éstas cimientan y edifican el entorno real del estudiante,
permitiéndole relacionarse con lo extra estético mediante la práctica artística
en el diario proceso de formación en la escuela.
Lamentablemente aún recorremos el mundo poco constructivo de la copia
sin ahondar en la creación real, la crítica y la protesta que les permite tanto
a los estudiantes como a los docentes escudriñar en las entrañas del arte,
dando florecimiento a un auténtico e interesante sello artístico.
PRÁCTICAS ARTÍSTICAS DE LA ESCUELA Y LA DIMENSIÓN
ESTÉTICA
La dimensión estética en la escuela guía en la formación del ser,
forjando en él un valor estético que favorece el desarrollo integral en el
ámbito cultural y social, generando como respuesta cambios substanciales en la
creación, admiración y reproducción del arte, como también en la mejora de las
relaciones interpersonales.
La escuela busca que por medio de los procesos de creación se atesore la
cultura y se forje en los estudiantes las percepciones a partir de las diversas
categorías estéticas, en pos de ahondar en sus necesidades sensibles y su
crecimiento dentro de la educación.
Encuentros y distanciamientos de la estética y la
belleza en la escuela
En la escuela actualmente encontramos que la
percepción de la belleza está marcada por las tendencias de la moda y la
imposición de diversos estándares que la sociedad crea a través de la historia.
Cabe aclarar que si el proceso de perfeccionamiento
y progreso del estudiante esta soportado por la práctica y ejecución constante
de la educación artística, que brinda por si sola diversas herramientas y
posibilidades donde se potencia y fortalece la expresión y la creatividad, se
remozaría la percepción y concepción de lo estético para generar con ésta una
visión crítica, desde la vivencia individual, personal y sensible con una
perspectiva argumentativa dándole así al estudiante herramientas formativas
para su vida.
La estética y la categoría de la belleza no son lo
mismo, no los podría catalogar como sinónimos en la escuela, dado que la
estética está dirigida a lo que el estudiante percibe, aprecie o sea conmovido
por el producto artístico realizado y a partir de este tenga una visión crítica
e individual al respecto, mientras que la belleza es solo una de las categorías
que el estudiante en su autónoma libertar le da a una persona, animal,
naturaleza o cosa. Así como lo puede catalogar como bello, también puede ser
feo, grotesco, cómico, sublime, etc.; ubicándolo entonces desde su experiencia
en una de las categorías de la estética.
Cabe aclarar que la belleza es sin duda la
categoría más reconocida de la estética y está influenciada por las tendencias
comerciales orientándola a un prospecto deseado de la vida, limitando el
interés del estudiante a la educación artística a través del cuerpo la
creatividad, la socialización, entre otras, ya que están enfocados a ser
calificados por la sociedad basándose en dichos estándares o tendencias comerciales.
Adicional a esto el arte está sumergido en una
división entre sectores sociales.
Por otro lado, pienso que, si es posible agrupar en
la escuela el arte, lo estético y lo extra estético porque ayudan al desarrollo
del saber, cuándo vinculan el cuerpo, la lectura real, la cultura, el contexto
socio-político y las competencias cognitivas, originando así, un proceso de
investigación, apropiación y autenticidad.
Es allí donde el docente como guía del proceso
formativo reúne estos tres aspectos para valorar y analizar el desarrollo del
estudiante.
Mientras el arte y sus expresiones estén presentes, existirá también la
contemplación estética, que desencadenara en una visión individual, critica, de
ideas, creación, conceptos, criterios, y así mismo la construcción de una
experiencia personal.
La educación artística es
indispensable en la escuela, porque permite a los niños adquirir diversas
competencias y rutinas mentales que a su vez están en armonía con la naturaleza
del ser humano y son indispensables para el aprendizaje de cualquier asignatura
escolar y para la vida.
En las artes plásticas tienen un profundo desarrollo del lenguaje
visual, con este podemos habituarnos a contemplan, comprender, reconocer las
formas y valores del mundo que nos rodea, desarrollando a su vez la
creatividad, imaginación, y autoconfianza, como también las destrezas motoras
finas y la coordinación viso-motriz.
De otra manera, la música nos muestra una mágica combinación de leyes,
ritmos, armonías y melodías, desarrollando la percepción, auto expresión, atención y
concentración, anticipación, organización y sincronización del movimiento, fortaleciendo
la sensibilidad del niño.
En la danza por su
parte el estudiante usa su cuerpo como medio de expresión, reconociéndose a sí
mismo y su entorno, desarrollando la expresión corporal, la sensibilidad
propioceptiva, la socialización, la capacidad motora gruesa. Fortaleciendo el
equilibrio del sistema nervioso el control postural y los gestos.
En el teatro convergen la
comunicación, expresión de emociones e ideas desarrollando aspectos cognitivos,
afectivos, sociales y valorativos, dando salida a los sentimientos y emociones
de los estudiantes, favoreciendo la creatividad, motivación, y autoconfianza.
Para concluir,
considero que una escuela cumple con su función real si apuesta por una
enseñanza que vincule profundamente la presencia del arte en la vida y el
crecimiento de los estudiantes, con la educación estética direccionada a la
formación de un ser que comprenda los cambios del universo, el pensamiento
diverso, las relaciones interpersonales, los sentimientos éticos, los valores,
el orden y la naturaleza.
Como reflexión final, retomo las palabras de María
Alexandra Rendón
(2009),
al apuntar que
...es
necesario llamar la atención acerca del hecho de que nos hemos convertido en
esclavos de una mitad del cerebro y que, al ser lógicos y depender del
lenguaje, hacemos que el mundo se adapte a la visión que nos impone el cerebro
izquierdo, suprimiendo la parte más creativa de nosotros, la cual está siendo
relegada además en los diferentes espacios, incluso en el escolar (132).
El arte es el alma de todo el sistema educativo.
BIBLIOGRAFÍA
TEXTOS
*La educación estética y artística en la educación básica y media.
*Lineamientos curriculares.
*Serie lineamientos curriculares Educación artística.
*Educación estética y educación artística. Reflexiones para la enseñanza
creativa.
*Calidad estética del entorno escolar.
*La educación estética
y artística para la educación primaria.
PÁGINAS WEB
VIDEOS
CONCLUSIONES
El
docente es el guía indispensable en la formación del niño, ya que, por medio de
la estética y la educación artística, lo lleva por el camino de los valores y
la ética, forjando un ser humano sensible, capaz de afrontar el huracán de
sucesos de la vida y sopesarlo con las herramientas necesarias para así,
encarar el mundo con comprensión, tolerancia, amor y armonía, ayudando de esta
forma al crecimiento social y humano de la comunidad.
La
estética por su parte nos conduce en una apertura de posibilidades,
enseñándonos que cada ser es un mundo; así mismo, su percepción de todo lo que
ve, siente, palpa, observa, o escucha.
El
arte y la educación artística nos permiten vivenciar dicha estética,
sensibilizar, transformar y fortalecer al niño de múltiples formas, guiándolo
para que aprenda a contemplan, comprender, reconocer las formas y valores del
mundo que nos rodea, desarrollando a su vez la creatividad, imaginación y
autoconfianza; afianzar las destrezas motoras finas, la coordinación
viso-motriz, la percepción, auto expresión, atención y concentración,
anticipación, organización y sincronización del movimiento. La expresión
corporal, la sensibilidad propioceptiva, la socialización, la capacidad motora
gruesa, fortalecen el equilibrio del sistema nervioso, el control postural y
los gestos, expresión de emociones e ideas y desarrollando aspectos cognitivos,
afectivos, sociales y valorativos, dando salida a los sentimientos y emociones
de los estudiantes, favoreciendo la creatividad, motivación y autoconfianza.
La
educación artística es parte fundamental para el desarrollo del niño y a pesar
de la situación general actual de la escuela, que minimiza su importancia,
función y valor; como docentes debemos darle la jerarquía que merece, con
calidad, bases y herramientas sólidas, dándole al niño una visión amplia de la
vida y sus contrastes, con un sentido crítico, sensible, autentico y personal.